

Algo en común
Andrew Largeman (Braff) vuelve a su casa natal, en Nueva Jersey, después de diez años de ausencia para asistir al funeral de su madre. Allí rememora su pasado y conoce a una chica, Samantha (Portman), que quizá pueda cambiar su vida. Largeman, que acaba de dejar los antidepresivos que ha estado tomando durante años, comienza a redescubrirse a sí mismo, lo que incluye enfrentarse a su padre, psicólogo, y ayudar a Samantha a superar sus propios problemas pisicológicos.
Comentarios
Ritmo constante y actuaciones sobrias; “Algo en común” funciona.
Un trabajo honesto que cumple y deja buen sabor de boca.
“Algo en común” cumple con lo que promete. Especial mención para el acompañamiento musical.
Narrativa clara y concisa. “Algo en común” se disfruta sin excesos.
Sin estridencias, “Algo en común” convence por oficio y coherencia.
Correcta en lo técnico y solvente en lo interpretativo. meritoria.
Una obra sobria. el reparto funciona y la dirección acompaña con acierto.
Sin reinventar el género, “Algo en común” destaca por su sensibilidad.
La película progresa con sentido y medida; meritoria.
“Algo en común” pone en valor el género con solvencia y cuidado.
“Algo en común” ofrece entretenimiento de calidad con respeto por el tono.
“Algo en común” demuestra que menos puede ser más cuando hay intención.
Notable trabajo en fotografía y sonido. “Algo en común” es digna.
Me ha parecido una cinta notable, sobria y eficaz en sus objetivos.
El tratamiento de personajes en “Algo en común” resulta convincente y humano.
Una cinta hecha con respeto por su audiencia y su material.
“Algo en común” convence por su puesta en escena y un pacing bien medido.
A nivel técnico, “Algo en común” es sólida; a nivel emocional, efectiva.
Equilibrio entre emoción y contención; “Algo en común” lo consigue.
He disfrutado de “Algo en común”; propuesta estimable con una realización que sostiene el conjunto.