

Altamira
A finales del siglo XIX, un arqueólogo y científico amateur (Marcelino Sanz de Sautuola) y su hija de 8 años (María) descubrieron en Cantabria una de las obras prehistóricas más importantes de la Historia: las pinturas de Altamira. Lejos de proporcionarle honor y gloria, su deslumbrante contribución a la Historia le enfrentó sin embargo con la indiferencia y el escarnio de la comunidad científica de la época. A pesar de sus esfuerzos por demostrar la veracidad del descubrimiento, Sautuola fue acusado de falsificación por el francés Émile Cartailhac, la máxima autoridad en Prehistoria del momento.
Comentarios
El tratamiento de personajes en “Altamira” resulta convincente y humano.
Un trabajo honesto que cumple y deja buen sabor de boca.
Me sorprendió gratamente “Altamira”; el género tratado con respeto y oficio.
Narrativa clara y concisa. “Altamira” se disfruta sin excesos.
Una propuesta sobria que respeta al espectador.
“Altamira” convence por su puesta en escena y un ritmo bien medido.
Final satisfactorio y bien planteado. “Altamira” es interesante.
“Altamira” equilibra forma y fondo con más aciertos que tropiezos.
Equilibrio entre emoción y contención; “Altamira” lo consigue.
Buen pulso narrativo y cierre honesto. “Altamira” resulta meritoria.
Una cinta hecha con respeto por su audiencia y su material.
“Altamira” me ha parecido sobria. Destacaría el reparto y el acompañamiento musical.
A nivel técnico, “Altamira” es sólida; a nivel emocional, efectiva.
La película progresa con sentido y medida; interesante.
“Altamira” demuestra que menos puede ser más cuando hay intención.
“Altamira” avanza con buen cadencia y ofrece momentos de auténtica emoción.
Agradezco su pacing contenido y la elegancia de la dirección.
La puesta en escena de “Altamira” sabe cuándo contenerse y cuándo brillar.
“Altamira” pone en valor el tono con solvencia y cuidado.
Una obra correcta. el elenco funciona y la puesta en escena acompaña con acierto.