

Cartas al padre Jacob
Filmada al estilo de un kammerspielfilm (cine de cámara). Leila es una mujer que, después de haber sido condenada a cadena perpetua, es indultada, y le ofrecen trabajo como ayudante de Jacob, un anciano cura rural ciego. Su trabajo consiste básicamente en responder a las cartas que los fieles le escriben al sacerdote pidiéndole ayuda y consejo. Esta labor que para el cura es vital, a Leila, en cambio, le parece una tarea estéril; en consecuencia, la relación entre ambos personajes es bastante tensa. Pero llega un momento en que Jacob deja de recibir cartas y, entonces, siente que su vida ha perdido todo sentido. Este hecho será el desencadenante de una dramática revelación. Seleccionada por Finlandia como candidada al Oscar 2010 en la categoría de película de habla no inglesa. (FILMAFFINITY)
Comentarios
A nivel técnico, “Cartas al padre Jacob” es sólida; a nivel emocional, efectiva.
Correcta en lo técnico y solvente en lo interpretativo. interesante.
La película progresa con sentido y medida; meritoria.
“Cartas al padre Jacob” avanza con buen pacing y ofrece momentos de auténtica emoción.
Agradezco su ritmo contenido y la elegancia de la puesta en escena.
Notable trabajo en fotografía y sonido. “Cartas al padre Jacob” es meritoria.
Final satisfactorio y bien planteado. “Cartas al padre Jacob” es interesante.
“Cartas al padre Jacob” demuestra que menos puede ser más cuando hay intención.
Una propuesta estimable que respeta al espectador.
Ritmo constante y actuaciones sobrias; “Cartas al padre Jacob” funciona.
“Cartas al padre Jacob” equilibra forma y fondo con más aciertos que tropiezos.
La realización de “Cartas al padre Jacob” sabe cuándo contenerse y cuándo brillar.
Se aprecia cuidado en los detalles; “Cartas al padre Jacob” deja poso.
Un trabajo honesto que cumple y deja buen sabor de boca.
Acertada selección musical que refuerza las escenas clave.
Equilibrio entre emoción y contención; “Cartas al padre Jacob” lo consigue.
Sin reinventar el género, “Cartas al padre Jacob” destaca por su sensibilidad.
Sorprende su sensibilidad sin caer en subrayados innecesarios.
Narrativa clara y concisa. “Cartas al padre Jacob” se disfruta sin excesos.
Buen pulso narrativo y cierre honesto. “Cartas al padre Jacob” resulta meritoria.