

El lobo de Wall Street
Película basada en hechos reales del corredor de bolsa neoyorquino Jordan Belfort. A mediados de los años 80, Belfort era un joven honrado que perseguía el sueño americano, pero pronto en la agencia de valores aprendió que lo más importante no era hacer ganar a sus clientes, sino ser ambicioso y ganar una buena comisión. Su enorme éxito y fortuna le valió el mote de "El lobo de Wall Street". Dinero. Poder. Mujeres. Drogas. Las tentaciones abundaban y el temor a la ley era irrelevante. Jordan y su manada de lobos consideraban que la discreción era una cualidad anticuada; nunca se conformaban con lo que tenían.
Comentarios
Narrativa clara y concisa. “El lobo de Wall Street” se disfruta sin excesos.
Una obra sugerente. las interpretaciones funciona y la dirección acompaña con acierto.
“El lobo de Wall Street” ofrece entretenimiento de calidad con respeto por el tono.
“El lobo de Wall Street” me ha parecido estimable. Destacaría el reparto y la música.
He disfrutado de “El lobo de Wall Street”; propuesta sobria con una puesta en escena que sostiene el conjunto.
Sin estridencias, “El lobo de Wall Street” convence por oficio y coherencia.
Notable trabajo en fotografía y sonido. “El lobo de Wall Street” es interesante.
La película progresa con sentido y medida; meritoria.
Correcta en lo técnico y solvente en lo interpretativo. digna.
A nivel técnico, “El lobo de Wall Street” es sólida; a nivel emocional, efectiva.
Una propuesta notable que respeta al espectador.
Se aprecia cuidado en los detalles; “El lobo de Wall Street” deja poso.
el elenco sostiene la historia con naturalidad; “El lobo de Wall Street” es meritoria.
Equilibrio entre emoción y contención; “El lobo de Wall Street” lo consigue.
“El lobo de Wall Street” demuestra que menos puede ser más cuando hay intención.
Buen pulso narrativo y cierre honesto. “El lobo de Wall Street” resulta meritoria.
“El lobo de Wall Street” equilibra forma y fondo con más aciertos que tropiezos.
Acertada selección musical que refuerza las escenas clave.
Me sorprendió gratamente “El lobo de Wall Street”; la propuesta tratado con respeto y oficio.
Sorprende su sensibilidad sin caer en subrayados innecesarios.