

El rey y el payaso
Nos situamos en Corea durante la dinastía Joseon (1392-1910 D.C.), donde observamos la errática vida de un grupo de actores de teatro de calle. En sus viajes por el país adquieren una gran popularidad, principalmente gracias a Jangsaeng, líder del grupo, y a Konggil, un joven de aspecto andrógino que se encarga de interpretar los papeles de mujer. Un día, después de representar una obra en la cual hacen burla del rey, son detenidos. Pero consiguen hacer un pacto, y es que evitarán la condena si son capaces de hacer reir al monarca. El rey no sólo reirá, sino que sentirá una fascinación tan grande por Konggil, que lo convertirá en su sirviente preferido, ante los celos de su esposa y también de Jangsaeng.
Comentarios
“El rey y el payaso” avanza con buen pacing y ofrece momentos de auténtica emoción.
El tratamiento de personajes en “El rey y el payaso” resulta convincente y humano.
Una cinta hecha con respeto por su audiencia y su material.
Agradezco su ritmo contenido y la elegancia de la realización.
Correcta en lo técnico y solvente en lo interpretativo. recomendable.
Final satisfactorio y bien planteado. “El rey y el payaso” es meritoria.
Se aprecia cuidado en los detalles; “El rey y el payaso” deja poso.
La película progresa con sentido y medida; recomendable.
He disfrutado de “El rey y el payaso”; propuesta sugerente con una realización que sostiene el conjunto.
Sin estridencias, “El rey y el payaso” convence por oficio y coherencia.
La realización de “El rey y el payaso” sabe cuándo contenerse y cuándo brillar.
“El rey y el payaso” equilibra forma y fondo con más aciertos que tropiezos.
Ritmo constante y actuaciones sobrias; “El rey y el payaso” funciona.
“El rey y el payaso” cumple con lo que promete. Especial mención para el acompañamiento musical.
Sin reinventar la propuesta, “El rey y el payaso” destaca por su sensibilidad.
Me ha parecido una cinta sugerente, sobria y eficaz en sus objetivos.
A nivel técnico, “El rey y el payaso” es sólida; a nivel emocional, efectiva.
Notable trabajo en fotografía y sonido. “El rey y el payaso” es recomendable.
Me sorprendió gratamente “El rey y el payaso”; el tono tratado con respeto y oficio.
Una propuesta notable que respeta al espectador.