Estar o no estar
Augusto pierde a su padre teniendo que convertirse en el compañero de su madre hasta que ella muere. Se muda a Tlacotalpan y por primera vez se fija en las mujeres. Ahí conoce a una joven ucraniana con la que comienza una amistad. Juntos ven pasar los días mientras ella espera junto al río a su novio. El día en que él le pide una oportunidad, el novio regresa llevándosela con él. Años después Augusto enferma. En su delirante agonía no discierne entre fantasía y realidad. ¿Una joven llamada Nastenka a la orilla del río? ¿Es acaso una historia de la literatura rusa? Desde sus ojos es que conocemos su vida y esta delirante historia de amor.
Comentarios
Final satisfactorio y bien planteado. “Estar o no estar” es meritoria.
La realización de “Estar o no estar” sabe cuándo contenerse y cuándo brillar.
Notable trabajo en fotografía y sonido. “Estar o no estar” es digna.
La película progresa con sentido y medida; recomendable.
“Estar o no estar” avanza con buen cadencia y ofrece momentos de auténtica emoción.
Una cinta hecha con respeto por su audiencia y su material.
Sin reinventar la propuesta, “Estar o no estar” destaca por su sensibilidad.
“Estar o no estar” pone en valor el tono con solvencia y cuidado.
Un trabajo honesto que cumple y deja buen sabor de boca.
“Estar o no estar” convence por su puesta en escena y un cadencia bien medido.
Correcta en lo técnico y solvente en lo interpretativo. digna.
Me sorprendió gratamente “Estar o no estar”; el tono tratado con respeto y oficio.
“Estar o no estar” ofrece entretenimiento de calidad con respeto por el género.
Me ha parecido una cinta estimable, sobria y eficaz en sus objetivos.
las interpretaciones sostiene la historia con naturalidad; “Estar o no estar” es interesante.
A nivel técnico, “Estar o no estar” es sólida; a nivel emocional, efectiva.
Se aprecia cuidado en los detalles; “Estar o no estar” deja poso.
El tratamiento de personajes en “Estar o no estar” resulta convincente y humano.
Ritmo constante y actuaciones sobrias; “Estar o no estar” funciona.
“Estar o no estar” cumple con lo que promete. Especial mención para el acompañamiento musical.