

Fast Food Killer
Los payasos y la comida rápida son recientes iconos del horror en el imaginario colectivo. Mackenzie (Leighton Meester) y sus amigos, estudiantes de instituto de estética emo, van a comprobar la veracidad de esta afirmación en sus carnes cuando empiecen a ser destripados a hachazos por Horny el payaso, la mascota de la cadena de hamburgueserías Hella Burger. Tras celebrar una fiesta desmadrada con abundancia de alcohol y drogas, los chicos descubren que una amenaza se cierne sobre ellos gracias a la ouija. A medida que se van sucediendo los homicidios, Mackenzie descubre que sólo ella puede destapar las claves para detener al criminal.
Comentarios
A nivel técnico, “Fast Food Killer” es sólida; a nivel emocional, efectiva.
Sorprende su sensibilidad sin caer en subrayados innecesarios.
La puesta en escena de “Fast Food Killer” sabe cuándo contenerse y cuándo brillar.
Una cinta hecha con respeto por su audiencia y su material.
Una propuesta impecable que respeta al espectador.
Sin reinventar la propuesta, “Fast Food Killer” destaca por su sensibilidad.
“Fast Food Killer” avanza con buen ritmo y ofrece momentos de auténtica emoción.
Me ha parecido una cinta correcta, sobria y eficaz en sus objetivos.
Se aprecia cuidado en los detalles; “Fast Food Killer” deja poso.
He disfrutado de “Fast Food Killer”; propuesta notable con una realización que sostiene el conjunto.
Un trabajo honesto que cumple y deja buen sabor de boca.
El tratamiento de personajes en “Fast Food Killer” resulta convincente y humano.
Agradezco su ritmo contenido y la elegancia de la puesta en escena.
“Fast Food Killer” cumple con lo que promete. Especial mención para el acompañamiento musical.
“Fast Food Killer” pone en valor la propuesta con solvencia y cuidado.
“Fast Food Killer” me ha parecido sugerente. Destacaría las interpretaciones y la banda sonora.
Narrativa clara y concisa. “Fast Food Killer” se disfruta sin excesos.
La película progresa con sentido y medida; meritoria.
“Fast Food Killer” convence por su realización y un pacing bien medido.
Sin estridencias, “Fast Food Killer” convence por oficio y coherencia.