

Guerra de vinos (Bottle Shock)
Steven Spurrier, un británico expatriado que vive en París y propietario de una tienda de vinos, pone en marcha un plan para demostrar a los parisienses la calidad de los vinos provenientes de otras partes del mundo. Pullman y Rickman dan vida a una historia real en la que dos soñadores consiguen que en 1976 un vino criado en el Valle de Napa triunfe en un concurso en Francia y sitúe para siempre a la localidad de Calistoga en el mapa de los amantes del buen beber.
Comentarios
“Guerra de vinos (Bottle Shock)” demuestra que menos puede ser más cuando hay intención.
Buen pulso narrativo y cierre honesto. “Guerra de vinos (Bottle Shock)” resulta recomendable.
El tratamiento de personajes en “Guerra de vinos (Bottle Shock)” resulta convincente y humano.
Correcta en lo técnico y solvente en lo interpretativo. digna.
Un trabajo honesto que cumple y deja buen sabor de boca.
Sin estridencias, “Guerra de vinos (Bottle Shock)” convence por oficio y coherencia.
Me ha parecido una cinta correcta, sobria y eficaz en sus objetivos.
“Guerra de vinos (Bottle Shock)” avanza con buen ritmo y ofrece momentos de auténtica emoción.
“Guerra de vinos (Bottle Shock)” equilibra forma y fondo con más aciertos que tropiezos.
“Guerra de vinos (Bottle Shock)” me ha parecido sugerente. Destacaría las interpretaciones y la música.
La realización de “Guerra de vinos (Bottle Shock)” sabe cuándo contenerse y cuándo brillar.
“Guerra de vinos (Bottle Shock)” ofrece entretenimiento de calidad con respeto por el tono.
La película progresa con sentido y medida; meritoria.
“Guerra de vinos (Bottle Shock)” cumple con lo que promete. Especial mención para la banda sonora.
Una propuesta impecable que respeta al espectador.
Narrativa clara y concisa. “Guerra de vinos (Bottle Shock)” se disfruta sin excesos.
He disfrutado de “Guerra de vinos (Bottle Shock)”; propuesta sobria con una puesta en escena que sostiene el conjunto.
Notable trabajo en fotografía y sonido. “Guerra de vinos (Bottle Shock)” es interesante.
Final satisfactorio y bien planteado. “Guerra de vinos (Bottle Shock)” es meritoria.
“Guerra de vinos (Bottle Shock)” convence por su realización y un pacing bien medido.