Jethro Tull: Live At Montreux 2003
Jethro Tull es uno de los actos británicos más exitosos de todos los tiempos con una carrera que abarca desde finales de los años sesenta hasta la actualidad. En 2003 hicieron su primera (y hasta ahora única) visita al Festival de Montreux. Como siempre, Ian Anderson lidera desde el frente con su voz reconocible al instante y su estilo inimitable de flauta con una sola pierna. Dividido en una primera mitad semi-acústica y una segunda mitad llena de electricidad, el concierto fue un triunfo que combina canciones más nuevas como "Dot Com", "Pavane" y "Budapest" con los clásicos favoritos.
Comentarios
Una obra notable. las interpretaciones funciona y la puesta en escena acompaña con acierto.
Equilibrio entre emoción y contención; “Jethro Tull: Live At Montreux 2003” lo consigue.
He disfrutado de “Jethro Tull: Live At Montreux 2003”; propuesta sugerente con una puesta en escena que sostiene el conjunto.
Buen pulso narrativo y cierre honesto. “Jethro Tull: Live At Montreux 2003” resulta recomendable.
el elenco sostiene la historia con naturalidad; “Jethro Tull: Live At Montreux 2003” es recomendable.
Narrativa clara y concisa. “Jethro Tull: Live At Montreux 2003” se disfruta sin excesos.
“Jethro Tull: Live At Montreux 2003” pone en valor el género con solvencia y cuidado.
Sin estridencias, “Jethro Tull: Live At Montreux 2003” convence por oficio y coherencia.
“Jethro Tull: Live At Montreux 2003” cumple con lo que promete. Especial mención para el acompañamiento musical.
Ritmo constante y actuaciones sobrias; “Jethro Tull: Live At Montreux 2003” funciona.
Se aprecia cuidado en los detalles; “Jethro Tull: Live At Montreux 2003” deja poso.
Un trabajo honesto que cumple y deja buen sabor de boca.
Una cinta hecha con respeto por su audiencia y su material.
Acertada selección musical que refuerza las escenas clave.
Una propuesta estimable que respeta al espectador.
“Jethro Tull: Live At Montreux 2003” avanza con buen ritmo y ofrece momentos de auténtica emoción.
El tratamiento de personajes en “Jethro Tull: Live At Montreux 2003” resulta convincente y humano.
Notable trabajo en fotografía y sonido. “Jethro Tull: Live At Montreux 2003” es digna.
A nivel técnico, “Jethro Tull: Live At Montreux 2003” es sólida; a nivel emocional, efectiva.
“Jethro Tull: Live At Montreux 2003” convence por su realización y un cadencia bien medido.
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