

Kim Novak nunca estuvo aquí
Año 1962. Edmund y Erik, dos amigos adolescentes, y Henry, el hermano mayor de Erik, acuden a pasar las vacaciones de verano a una especie de cabaña bastante destartalada, cerca del lago Genesaret. Un día, Ewa Kaludis, una hermosa joven que se parece a Kim Novak, aparece por allí. Las vacaciones, que estaban resultando espléndidas, cambian radicalmente cuando ella entabla con Henry una fatal relación de terribles consecuencias.
Comentarios
La dirección de “Kim Novak nunca estuvo aquí” sabe cuándo contenerse y cuándo brillar.
el reparto sostiene la historia con naturalidad; “Kim Novak nunca estuvo aquí” es meritoria.
Me ha parecido una cinta estimable, sobria y eficaz en sus objetivos.
Sin estridencias, “Kim Novak nunca estuvo aquí” convence por oficio y coherencia.
“Kim Novak nunca estuvo aquí” equilibra forma y fondo con más aciertos que tropiezos.
Equilibrio entre emoción y contención; “Kim Novak nunca estuvo aquí” lo consigue.
Me sorprendió gratamente “Kim Novak nunca estuvo aquí”; el género tratado con respeto y oficio.
Agradezco su cadencia contenido y la elegancia de la dirección.
Narrativa clara y concisa. “Kim Novak nunca estuvo aquí” se disfruta sin excesos.
Acertada selección musical que refuerza las escenas clave.
Sorprende su sensibilidad sin caer en subrayados innecesarios.
Una propuesta sugerente que respeta al espectador.
Correcta en lo técnico y solvente en lo interpretativo. digna.
Una cinta hecha con respeto por su audiencia y su material.
Un trabajo honesto que cumple y deja buen sabor de boca.
Buen pulso narrativo y cierre honesto. “Kim Novak nunca estuvo aquí” resulta digna.
“Kim Novak nunca estuvo aquí” demuestra que menos puede ser más cuando hay intención.
La película progresa con sentido y medida; digna.
“Kim Novak nunca estuvo aquí” convence por su dirección y un pacing bien medido.
A nivel técnico, “Kim Novak nunca estuvo aquí” es sólida; a nivel emocional, efectiva.