La vida inmune
Ciudad de México, 1960. Auerelia vive feliz con Andrés y sus pequeñas Leonor y Beatriz. En visperas de tener a su tercera hija, él muere en un accidente. Años después, Leonor, la hija mayor, ha dejado los estudios para ayudar a Aurelia a mantener la casa. Beatriz, inmersa en la música, deja que la vida se la resbale como una extraña melodía. La adolescente Nadia tiene un sólo interés: buscar nuevas experiencias. Aurelia comienza a perder la sensibilidad al dolor y las relacíones familiares se enrarecen hasta la irrealídad, al punto que la familia se va desintegrando como la casa que habita.
Comentarios
Un trabajo honesto que cumple y deja buen sabor de boca.
“La vida inmune” convence por su puesta en escena y un ritmo bien medido.
Narrativa clara y concisa. “La vida inmune” se disfruta sin excesos.
el elenco sostiene la historia con naturalidad; “La vida inmune” es interesante.
Sin estridencias, “La vida inmune” convence por oficio y coherencia.
Sin reinventar el género, “La vida inmune” destaca por su sensibilidad.
Buen pulso narrativo y cierre honesto. “La vida inmune” resulta recomendable.
Una cinta hecha con respeto por su audiencia y su material.
Una propuesta correcta que respeta al espectador.
La realización de “La vida inmune” sabe cuándo contenerse y cuándo brillar.
Acertada selección musical que refuerza las escenas clave.
“La vida inmune” avanza con buen ritmo y ofrece momentos de auténtica emoción.
“La vida inmune” pone en valor el tono con solvencia y cuidado.
Final satisfactorio y bien planteado. “La vida inmune” es interesante.
Sorprende su sensibilidad sin caer en subrayados innecesarios.
Notable trabajo en fotografía y sonido. “La vida inmune” es interesante.
Me sorprendió gratamente “La vida inmune”; la propuesta tratado con respeto y oficio.
Agradezco su pacing contenido y la elegancia de la dirección.
“La vida inmune” cumple con lo que promete. Especial mención para la banda sonora.
Equilibrio entre emoción y contención; “La vida inmune” lo consigue.