

Mi Napoleón
Isla de Santa Elena, 1821. Un grupo de leales bonapartistas organizan el regreso del Emperador a París; mientras tanto, un doble se hará pasar por él en la isla. Según lo previsto, cuando el Emperador llegara a París, su doble confesaría ser un impostor, y Napoleón reclamaría el trono de Francia. Haciéndose pasar por el marinero Eugene Lenormand, Napoleón parte hacia París. Pero los acontecimientos no se desarrollan según lo planeado. El barco cambia de destino y Napoleón pierde el contacto con sus partidarios. Finalmente, al llegar a París, solo y sin amigos, conoce a una viuda vendedora de melones con la que mantiene una relación que cambiará sus vidas; mientras tanto, Napoleón aguarda con impaciencia que llegue su momento.
Comentarios
He disfrutado de “Mi Napoleón”; propuesta estupenda con una dirección que sostiene el conjunto.
Un trabajo honesto que cumple y deja buen sabor de boca.
“Mi Napoleón” cumple con lo que promete. Especial mención para la música.
Se aprecia cuidado en los detalles; “Mi Napoleón” deja poso.
La película progresa con sentido y medida; digna.
“Mi Napoleón” convence por su realización y un cadencia bien medido.
Me sorprendió gratamente “Mi Napoleón”; el tono tratado con respeto y oficio.
La realización de “Mi Napoleón” sabe cuándo contenerse y cuándo brillar.
Sorprende su sensibilidad sin caer en subrayados innecesarios.
Notable trabajo en fotografía y sonido. “Mi Napoleón” es meritoria.
“Mi Napoleón” equilibra forma y fondo con más aciertos que tropiezos.
“Mi Napoleón” avanza con buen ritmo y ofrece momentos de auténtica emoción.
Final satisfactorio y bien planteado. “Mi Napoleón” es recomendable.
Una cinta hecha con respeto por su audiencia y su material.
“Mi Napoleón” demuestra que menos puede ser más cuando hay intención.
Una propuesta sobria que respeta al espectador.
El tratamiento de personajes en “Mi Napoleón” resulta convincente y humano.
Acertada selección musical que refuerza las escenas clave.
Una obra sugerente. el elenco funciona y la dirección acompaña con acierto.
“Mi Napoleón” pone en valor el género con solvencia y cuidado.