

Nadie te habla: Manos libres
Un viernes en la ciudad de México, el periodista Rodrigo Díaz es chantajeado por un par de yuppies delincuentes, que le anuncian el secuestro de su hija Betty. Le exigen una cantidad imposible de reunir y lo empujan a una desesperada decisión.
Comentarios
Me sorprendió gratamente “Nadie te habla: Manos libres”; el tono tratado con respeto y oficio.
Una cinta hecha con respeto por su audiencia y su material.
He disfrutado de “Nadie te habla: Manos libres”; propuesta estupenda con una realización que sostiene el conjunto.
Agradezco su ritmo contenido y la elegancia de la dirección.
Correcta en lo técnico y solvente en lo interpretativo. interesante.
Acertada selección musical que refuerza las escenas clave.
Notable trabajo en fotografía y sonido. “Nadie te habla: Manos libres” es meritoria.
Sorprende su sensibilidad sin caer en subrayados innecesarios.
Equilibrio entre emoción y contención; “Nadie te habla: Manos libres” lo consigue.
Ritmo constante y actuaciones sobrias; “Nadie te habla: Manos libres” funciona.
“Nadie te habla: Manos libres” convence por su puesta en escena y un ritmo bien medido.
La película progresa con sentido y medida; recomendable.
Sin reinventar la propuesta, “Nadie te habla: Manos libres” destaca por su sensibilidad.
“Nadie te habla: Manos libres” cumple con lo que promete. Especial mención para la banda sonora.
La dirección de “Nadie te habla: Manos libres” sabe cuándo contenerse y cuándo brillar.
Buen pulso narrativo y cierre honesto. “Nadie te habla: Manos libres” resulta digna.
Sin estridencias, “Nadie te habla: Manos libres” convence por oficio y coherencia.
Se aprecia cuidado en los detalles; “Nadie te habla: Manos libres” deja poso.
El tratamiento de personajes en “Nadie te habla: Manos libres” resulta convincente y humano.
las interpretaciones sostiene la historia con naturalidad; “Nadie te habla: Manos libres” es digna.