

Noche de vino y copas
Christian (Anders W. Berthelsen), un danés de 40 años, viaja a Buenos Aires con Oscar (Jamie Morton), su extravagante hijo adolescente. Su propósito es recuperar a su mujer (Paprika Steen), que los abandonó para convertirse en novia y representante de un famosísimo futbolista argentino (Sebastián Estévanez). Christian se presenta con la excusa de firmar los papeles del divorcio, pero sus planes se verán trastocados debido a una serie de enredos y acontecimientos inesperados. (FILMAFFINITY)
Comentarios
A nivel técnico, “Noche de vino y copas” es sólida; a nivel emocional, efectiva.
Sin estridencias, “Noche de vino y copas” convence por oficio y coherencia.
“Noche de vino y copas” ofrece entretenimiento de calidad con respeto por el género.
Final satisfactorio y bien planteado. “Noche de vino y copas” es meritoria.
“Noche de vino y copas” convence por su realización y un cadencia bien medido.
“Noche de vino y copas” equilibra forma y fondo con más aciertos que tropiezos.
El tratamiento de personajes en “Noche de vino y copas” resulta convincente y humano.
Sorprende su sensibilidad sin caer en subrayados innecesarios.
La realización de “Noche de vino y copas” sabe cuándo contenerse y cuándo brillar.
Se aprecia cuidado en los detalles; “Noche de vino y copas” deja poso.
“Noche de vino y copas” me ha parecido estupenda. Destacaría las interpretaciones y el acompañamiento musical.
Una obra estimable. el reparto funciona y la realización acompaña con acierto.
“Noche de vino y copas” avanza con buen pacing y ofrece momentos de auténtica emoción.
Ritmo constante y actuaciones sobrias; “Noche de vino y copas” funciona.
Una propuesta correcta que respeta al espectador.
Equilibrio entre emoción y contención; “Noche de vino y copas” lo consigue.
Me ha parecido una cinta sugerente, sobria y eficaz en sus objetivos.
He disfrutado de “Noche de vino y copas”; propuesta notable con una realización que sostiene el conjunto.
Correcta en lo técnico y solvente en lo interpretativo. meritoria.
Buen pulso narrativo y cierre honesto. “Noche de vino y copas” resulta digna.