

Nunca es tarde para enamorarse
Estando en Londres para la boda de su hija, Harvey Shine, pierde el avión a Nueva York, y por lo tanto pierde su trabajo. Mientras ahoga sus penas en el bar del aeropuerto, Harvey conoce a Kate, una empleada del gobierno británico atrapada en un ciclo sin fin de trabajo, llamadas telefónicas de su madre, y citas a ciegas. Inmediatamente se crea un vínculo entre este par de infelices, que pronto verán llegar el amor.
Comentarios
La puesta en escena de “Nunca es tarde para enamorarse” sabe cuándo contenerse y cuándo brillar.
Sin reinventar el tono, “Nunca es tarde para enamorarse” destaca por su sensibilidad.
He disfrutado de “Nunca es tarde para enamorarse”; propuesta sugerente con una realización que sostiene el conjunto.
Una cinta hecha con respeto por su audiencia y su material.
Final satisfactorio y bien planteado. “Nunca es tarde para enamorarse” es recomendable.
A nivel técnico, “Nunca es tarde para enamorarse” es sólida; a nivel emocional, efectiva.
el reparto sostiene la historia con naturalidad; “Nunca es tarde para enamorarse” es recomendable.
Una obra impecable. el reparto funciona y la dirección acompaña con acierto.
Correcta en lo técnico y solvente en lo interpretativo. digna.
Narrativa clara y concisa. “Nunca es tarde para enamorarse” se disfruta sin excesos.
“Nunca es tarde para enamorarse” avanza con buen cadencia y ofrece momentos de auténtica emoción.
Una propuesta estupenda que respeta al espectador.
“Nunca es tarde para enamorarse” convence por su realización y un pacing bien medido.
Sin estridencias, “Nunca es tarde para enamorarse” convence por oficio y coherencia.
“Nunca es tarde para enamorarse” demuestra que menos puede ser más cuando hay intención.
Agradezco su cadencia contenido y la elegancia de la realización.
“Nunca es tarde para enamorarse” pone en valor la propuesta con solvencia y cuidado.
“Nunca es tarde para enamorarse” me ha parecido impecable. Destacaría el elenco y la música.
“Nunca es tarde para enamorarse” equilibra forma y fondo con más aciertos que tropiezos.
“Nunca es tarde para enamorarse” ofrece entretenimiento de calidad con respeto por el tono.