

Quo vadis, baby?
Giorgia (Angela Baraldi), una detective privada de aspecto descuidado y fuerte carácter, trabaja en la agencia privada que su padre posee en Bolonia. Dedica la mayor parte del tiempo a investigar casos de infidelidad matrimonial. Dieciséis años después del misterioso suicidio de su hermana menor Ada (Claudia Zanella), recibe una caja con cintas de vídeo que constituyen una especie de diario íntimo de Ada. El vídeo muestra una joven feliz y extrovertida que sueña con el futuro, que lucha por empezar una carrera artística y que trata de ocultar una relación amorosa clandestina. Mientras investiga, Giorgia se sumerge tanto en el pasado de su hermana como en el suyo.
Comentarios
A nivel técnico, “Quo vadis, baby?” es sólida; a nivel emocional, efectiva.
“Quo vadis, baby?” ofrece entretenimiento de calidad con respeto por el género.
La película progresa con sentido y medida; recomendable.
Una propuesta correcta que respeta al espectador.
He disfrutado de “Quo vadis, baby?”; propuesta estupenda con una puesta en escena que sostiene el conjunto.
Agradezco su cadencia contenido y la elegancia de la realización.
Buen pulso narrativo y cierre honesto. “Quo vadis, baby?” resulta meritoria.
Un trabajo honesto que cumple y deja buen sabor de boca.
Sorprende su sensibilidad sin caer en subrayados innecesarios.
“Quo vadis, baby?” me ha parecido correcta. Destacaría el reparto y la banda sonora.
Sin reinventar el tono, “Quo vadis, baby?” destaca por su sensibilidad.
El tratamiento de personajes en “Quo vadis, baby?” resulta convincente y humano.
Equilibrio entre emoción y contención; “Quo vadis, baby?” lo consigue.
Acertada selección musical que refuerza las escenas clave.
Sin estridencias, “Quo vadis, baby?” convence por oficio y coherencia.
La dirección de “Quo vadis, baby?” sabe cuándo contenerse y cuándo brillar.
Una obra sobria. las interpretaciones funciona y la realización acompaña con acierto.
Una cinta hecha con respeto por su audiencia y su material.
“Quo vadis, baby?” convence por su realización y un ritmo bien medido.
Se aprecia cuidado en los detalles; “Quo vadis, baby?” deja poso.