

Rave de una noche de verano
El sueño de una noche de verano de William Shakespeare cambia el escenario a una rave moderna. Puck es un traficante de drogas, la flor mágica llamada love-in-ocleness se reemplaza con el éxtasis mágico, y el Rey y la Reina de las Hadas son los anfitriones del rave y el DJ.
Comentarios
“Rave de una noche de verano” equilibra forma y fondo con más aciertos que tropiezos.
Agradezco su pacing contenido y la elegancia de la puesta en escena.
La película progresa con sentido y medida; recomendable.
La dirección de “Rave de una noche de verano” sabe cuándo contenerse y cuándo brillar.
A nivel técnico, “Rave de una noche de verano” es sólida; a nivel emocional, efectiva.
Acertada selección musical que refuerza las escenas clave.
“Rave de una noche de verano” ofrece entretenimiento de calidad con respeto por el tono.
Me sorprendió gratamente “Rave de una noche de verano”; el tono tratado con respeto y oficio.
Final satisfactorio y bien planteado. “Rave de una noche de verano” es meritoria.
Un trabajo honesto que cumple y deja buen sabor de boca.
El tratamiento de personajes en “Rave de una noche de verano” resulta convincente y humano.
Sorprende su sensibilidad sin caer en subrayados innecesarios.
“Rave de una noche de verano” demuestra que menos puede ser más cuando hay intención.
Sin reinventar el tono, “Rave de una noche de verano” destaca por su sensibilidad.
“Rave de una noche de verano” convence por su dirección y un cadencia bien medido.
Me ha parecido una cinta estupenda, sobria y eficaz en sus objetivos.
Narrativa clara y concisa. “Rave de una noche de verano” se disfruta sin excesos.
Ritmo constante y actuaciones sobrias; “Rave de una noche de verano” funciona.
Se aprecia cuidado en los detalles; “Rave de una noche de verano” deja poso.
Una cinta hecha con respeto por su audiencia y su material.