Un lugar donde quedarse
Cheyenne es una antigua estrella de rock. A pesar de sus cincuenta, conserva una imagen gótica y vive en Dublín de los derechos de autor. La muerte de su padre, con quien no tenía relación alguna, le lleva a Nueva York, donde descubre que su progenitor vivía con una obsesión: vengarse de una humillación de la que había sido víctima. Cheyenne decide hacer realidad ese deseo de venganza, pero, para ello tendrá que emprender un viaje a través de América.
Comentarios
La película progresa con sentido y medida; recomendable.
Sin estridencias, “Un lugar donde quedarse” convence por oficio y coherencia.
“Un lugar donde quedarse” cumple con lo que promete. Especial mención para el acompañamiento musical.
Me sorprendió gratamente “Un lugar donde quedarse”; el tono tratado con respeto y oficio.
Una cinta hecha con respeto por su audiencia y su material.
Correcta en lo técnico y solvente en lo interpretativo. recomendable.
Agradezco su ritmo contenido y la elegancia de la puesta en escena.
El tratamiento de personajes en “Un lugar donde quedarse” resulta convincente y humano.
“Un lugar donde quedarse” demuestra que menos puede ser más cuando hay intención.
Ritmo constante y actuaciones sobrias; “Un lugar donde quedarse” funciona.
Acertada selección musical que refuerza las escenas clave.
Sin reinventar el tono, “Un lugar donde quedarse” destaca por su sensibilidad.
Narrativa clara y concisa. “Un lugar donde quedarse” se disfruta sin excesos.
“Un lugar donde quedarse” convence por su puesta en escena y un pacing bien medido.
el reparto sostiene la historia con naturalidad; “Un lugar donde quedarse” es recomendable.
A nivel técnico, “Un lugar donde quedarse” es sólida; a nivel emocional, efectiva.
“Un lugar donde quedarse” equilibra forma y fondo con más aciertos que tropiezos.
Un trabajo honesto que cumple y deja buen sabor de boca.
“Un lugar donde quedarse” ofrece entretenimiento de calidad con respeto por el género.
Final satisfactorio y bien planteado. “Un lugar donde quedarse” es interesante.