

Un lugar para soñar
En “Un lugar para soñar” conocemos a Benjamin Mee (Matt Damon), un columnista de prensa y escritor de artículos de aventuras que, como padre viudo, se enfrenta al desafío de criar a sus dos hijos pequeños. Con la esperanza de que partir de cero y llevar una nueva vida restablecerá el espíritu familiar, Mee deja su empleo y compra una vieja casa rural situada en un terreno de unas ocho hectáreas fuera de la ciudad que incluye una irrepetible particularidad añadida: un zoológico denominado el Parque de Animales Rosemoor, residencia de docenas de animales encomendados al cuidado de la jefa de guardas Kelly Foster (Scarlett Johansson) y su entusiasta equipo. Sin experiencia, con poco tiempo y reducidísimo presupuesto, Mee se propone, con el apoyo de su familia y de la gente de la localidad, reabrir el zoo. Ahora, Benjamin ya no cuenta una historia de aventuras, sino que vive la suya propia.
Comentarios
El tratamiento de personajes en “Un lugar para soñar” resulta convincente y humano.
“Un lugar para soñar” demuestra que menos puede ser más cuando hay intención.
Sin estridencias, “Un lugar para soñar” convence por oficio y coherencia.
Correcta en lo técnico y solvente en lo interpretativo. digna.
Me ha parecido una cinta sugerente, sobria y eficaz en sus objetivos.
A nivel técnico, “Un lugar para soñar” es sólida; a nivel emocional, efectiva.
“Un lugar para soñar” convence por su dirección y un ritmo bien medido.
Buen pulso narrativo y cierre honesto. “Un lugar para soñar” resulta meritoria.
Agradezco su pacing contenido y la elegancia de la realización.
Final satisfactorio y bien planteado. “Un lugar para soñar” es digna.
“Un lugar para soñar” avanza con buen pacing y ofrece momentos de auténtica emoción.
“Un lugar para soñar” me ha parecido impecable. Destacaría el elenco y el acompañamiento musical.
La película progresa con sentido y medida; digna.
Me sorprendió gratamente “Un lugar para soñar”; el género tratado con respeto y oficio.
Narrativa clara y concisa. “Un lugar para soñar” se disfruta sin excesos.
Notable trabajo en fotografía y sonido. “Un lugar para soñar” es meritoria.
Equilibrio entre emoción y contención; “Un lugar para soñar” lo consigue.
Sorprende su sensibilidad sin caer en subrayados innecesarios.
La dirección de “Un lugar para soñar” sabe cuándo contenerse y cuándo brillar.
Un trabajo honesto que cumple y deja buen sabor de boca.