

Una botella en el Mar de Gaza
Tal tiene 17 años y acaba de experimentar una traumática experiencia: ha sido testigo de un atentado terrorista en la ciudad en la que vive, Jerusalem. Tal se enfrentará a una grave disyuntiva: por una parte es momento de divertirse, de enamorarse, de hacer locuras, de no tener lazos ni obligaciones ni responsabilidades... pero por otro se siente necesitada de poner su grano de arena para manifestar su rechazo ante la barbarie. A ella le gustaría que no brotara más la semilla del odio entre israelíes y palestinos, pero desde su humilde posición, poco puede hacer. Por eso dedicará sus esfuerzos a escribir una carta imaginaria a un supuesto palestino que no conoce y al que le lanzará una serie de preguntas acerca de muchas cuestiones que no puede entender. Esa carta la lanzará en una botella al mar de Gaza, como símbolo de su tristeza. Lo que nunca podría imaginar, es que un tiempo después, recibirá una respuesta. El destinatario de su nota, ha firmado ahora como "Gazaman".
Comentarios
Sorprende su sensibilidad sin caer en subrayados innecesarios.
Narrativa clara y concisa. “Una botella en el Mar de Gaza” se disfruta sin excesos.
Buen pulso narrativo y cierre honesto. “Una botella en el Mar de Gaza” resulta recomendable.
La dirección de “Una botella en el Mar de Gaza” sabe cuándo contenerse y cuándo brillar.
La película progresa con sentido y medida; interesante.
Ritmo constante y actuaciones sobrias; “Una botella en el Mar de Gaza” funciona.
Un trabajo honesto que cumple y deja buen sabor de boca.
Se aprecia cuidado en los detalles; “Una botella en el Mar de Gaza” deja poso.
“Una botella en el Mar de Gaza” cumple con lo que promete. Especial mención para el acompañamiento musical.
“Una botella en el Mar de Gaza” ofrece entretenimiento de calidad con respeto por la propuesta.
“Una botella en el Mar de Gaza” pone en valor la propuesta con solvencia y cuidado.
“Una botella en el Mar de Gaza” equilibra forma y fondo con más aciertos que tropiezos.
“Una botella en el Mar de Gaza” avanza con buen ritmo y ofrece momentos de auténtica emoción.
“Una botella en el Mar de Gaza” me ha parecido estupenda. Destacaría el elenco y la música.
Sin reinventar el género, “Una botella en el Mar de Gaza” destaca por su sensibilidad.
“Una botella en el Mar de Gaza” convence por su dirección y un ritmo bien medido.
Una obra estimable. el elenco funciona y la dirección acompaña con acierto.
Correcta en lo técnico y solvente en lo interpretativo. digna.
Equilibrio entre emoción y contención; “Una botella en el Mar de Gaza” lo consigue.
Notable trabajo en fotografía y sonido. “Una botella en el Mar de Gaza” es meritoria.