

Bichos raros
Lily es tímida, poquita cosa, dulce y rara. Este último es el calificativo que más abunda sobre ella, la causa de que a sus espaldas todos la señalen a carcajadas. Aún así, para Lily eso no es motivo de amargura, al contrario: es feliz sabiéndose distinta. Trabaja como cajera en un restaurante de comida rápida, y ya ni escucha las burlas de sus propios compañeros. Está demasiado pendiente de una hora concreta al mediodía, porque ése es el momento en que aparece para comer Jarrod, alguien como ella, otro inadaptado. Jarrod trabaja en una tienda de videojuegos, se considera un genio y sale de una depresión para meterse en otra. Jarrod prepara una fiesta de disfraces donde cada invitado se vestirá como su animal favorito. El suyo es un águila, el de Lily un tiburón.
Comentarios
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El tratamiento de personajes en “Bichos raros” resulta convincente y humano.
La dirección de “Bichos raros” sabe cuándo contenerse y cuándo brillar.
Sin estridencias, “Bichos raros” convence por oficio y coherencia.
Narrativa clara y concisa. “Bichos raros” se disfruta sin excesos.
el elenco sostiene la historia con naturalidad; “Bichos raros” es interesante.
Acertada selección musical que refuerza las escenas clave.
“Bichos raros” demuestra que menos puede ser más cuando hay intención.
Sin reinventar el tono, “Bichos raros” destaca por su sensibilidad.
Me ha parecido una cinta sobria, sobria y eficaz en sus objetivos.
Buen pulso narrativo y cierre honesto. “Bichos raros” resulta interesante.
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Una cinta hecha con respeto por su audiencia y su material.
Equilibrio entre emoción y contención; “Bichos raros” lo consigue.
“Bichos raros” convence por su dirección y un cadencia bien medido.
Final satisfactorio y bien planteado. “Bichos raros” es recomendable.
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“Bichos raros” equilibra forma y fondo con más aciertos que tropiezos.