

Bicicleta, Cuchara, Manzana
En el otoño de 2007, a Pasqual Maragall se le diagnostica la enfermedad de Alzheimer. Tras el duro golpe, él y su familia inician una cruzada contra la enfermedad, de la que esta película se convierte en testigo excepcional. Con inteligencia, sinceridad y buen humor, Maragall se deja retratar con su familia y los médicos para dejar constancia del día a día de su lucha personal. Dos años de seguimiento a un paciente excepcional dispuesto a que los científicos encuentren la cura antes de que la cifra de 26 millones de enfermos en el mundo se multiplique por 10. Una película dura, pero optimista a pesar de todo.
Comentarios
Agradezco su ritmo contenido y la elegancia de la puesta en escena.
“Bicicleta, Cuchara, Manzana” ofrece entretenimiento de calidad con respeto por el género.
Sin reinventar la propuesta, “Bicicleta, Cuchara, Manzana” destaca por su sensibilidad.
Una propuesta sugerente que respeta al espectador.
Narrativa clara y concisa. “Bicicleta, Cuchara, Manzana” se disfruta sin excesos.
“Bicicleta, Cuchara, Manzana” avanza con buen cadencia y ofrece momentos de auténtica emoción.
“Bicicleta, Cuchara, Manzana” pone en valor el género con solvencia y cuidado.
He disfrutado de “Bicicleta, Cuchara, Manzana”; propuesta estimable con una puesta en escena que sostiene el conjunto.
Sorprende su sensibilidad sin caer en subrayados innecesarios.
La película progresa con sentido y medida; meritoria.
Un trabajo honesto que cumple y deja buen sabor de boca.
Se aprecia cuidado en los detalles; “Bicicleta, Cuchara, Manzana” deja poso.
“Bicicleta, Cuchara, Manzana” equilibra forma y fondo con más aciertos que tropiezos.
La realización de “Bicicleta, Cuchara, Manzana” sabe cuándo contenerse y cuándo brillar.
Una cinta hecha con respeto por su audiencia y su material.
Me ha parecido una cinta correcta, sobria y eficaz en sus objetivos.
A nivel técnico, “Bicicleta, Cuchara, Manzana” es sólida; a nivel emocional, efectiva.
Buen pulso narrativo y cierre honesto. “Bicicleta, Cuchara, Manzana” resulta meritoria.
Notable trabajo en fotografía y sonido. “Bicicleta, Cuchara, Manzana” es recomendable.
Acertada selección musical que refuerza las escenas clave.